Reflexiones
Reflexiones para este año.
Luce una sonrisa y tendrás amigos; frunce el ceño y tendrás arrugas.
El momento que da más miedo es siempre justo antes de empezar.
El futuro no está escrito porque sólo el pueblo puede escribirlo.
En la vida no hay cosas que temer, sólo cosas que comprender.
El secreto de vivir en paz consiste en el arte de comprender a cada uno según su individualidad.
No hay barrera, cerradura, ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente.
El mundo cambia si dos se miran y se reconocen.
No pongas en peligro tu vida, eres todo lo que tienes.
Al principio lo llaman egoísmo saludable. Hoy sé que es amor a uno mismo.}
La palabra simpatía es de origen griego, se compone del prefijo sin (con, junto con) y de la raíz prthein (sentir, experimentar, sufrir). Literalmente simpatía significa, por lo tanto, sentir o sufrir juntos, la palabra expresa cierta comunión y pasividad, designa todo lo que pasa entre las personas en el campo afectivo.
La simpatía demuestra más bien experiencia que acción, porque no es un acto que surge de la voluntad o de la libertad humana, la gente la experimenta solamente.
En el terreno del amor, la simpatía es puramente afecto, en el que la decisión voluntaria y la elección no intervienen. Por otra parte, es mediante la simpatía que se llega a la amistad, en la que participa ahora sí, la voluntad, de lo cual podemos decir que la estructura de la amistad es“quiere el bien para ti, tanto como lo quiero para mí”.
En la amistad aparece la afirmación de “tú” y del “yo”. La unión de amigos surge gracias a la simpatía, que se apoya únicamente de emoción y sentimiento, la voluntad no hace más que consentir, además se logra un compromiso, por ello la amistad es parte fundamental del hombre, lo identifica como un ser capaz de verse en el otro.