De gran robustez, mide entre 30 y 160 cms. de longitud. La caracteriza el apéndice córneo que exhibe en la punta de la cola, compuesto hasta de 14 segmentos engarzados entre sí, que producen un sonido muy particular cuando el animal los agita. Es la más escasa de las cuatro especies ponzoñosas en México; actualmente su distribución está restringida a pocos puntos al norte por lo que se halla en peligro de extinción. Habita zonas de campo o monto sucio, preferentemente pedregosas. Se alimenta casi exclusivamente de mamíferos, especialmente roedores. Es una especie muy agresiva, pero como suele agitar su “cascabel” antes de morder, la víctima potencial queda advertida de su presencia.

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