Salud y Belleza

Tips para nuestra preciada salud y nuestra belleza.

Los médicos o nutriólogos señalan que una dieta se considera equilibrada si aporta los nutrientes y energía en cantidades tales que permiten mantener las funciones del organismo de una persona en un contexto de bienestar físico y mental, además debe adaptarse al género, edad y estado de salud.

En nuestros días, llenos de sobresaltos, contratiempos, vida sedentaria y situaciones que desgasan, es muy difícil comer diariamente la cantidad ideal de nutrientes.

Para mantener la buena salud hay que tener presente las visitas regulares al médico y hacer ejercicio regularmente (de 30 a 60 minutos diario)  para facilitarle al organismo la asimilación óptima de la energía de los alimentos y eliminar toxinas.

La alimentación moderna, sobre todo la urbana, es a menudo desequilibrada y por ello hay razonas para usar complementos alimenticios, siempre y cuando se consuman bajo la supervisión médica.

Un complemento actúa para la prevención y corrección de deficiencias de algún nutrimento, además provee los niveles óptimos que el organismo necesite.

Desde hace mucho tiempo se conocía la relación entre la comida y la salud, Hipócrates afirmaba que “nuestra alimentación es nuestra medicina”, también se sabe que está asociada a enfermedades como la diabetes, la osteoporosis, la obesidad y muchas otras; recientes investigaciones revelan la existencia de una relación entre la mala nutrición y el surgimiento de ciertos tipos de cáncer.

La primera civilización que utilizó una instalación parecida a nuestra actual ducha fue la griega. Esta cultura desarrolló estructuras que bombeaban agua hacia dentro y fuera de salas grandes para baños comunales. Tales construcciones se descubrieron en excavaciones de la actual Turquia.

Los romanos también continuaron con esta costumbre, aunque tras la caída de su imperio y el surgimiento del Cristianismo, la higiene se convirtió en un tabú religioso: la Iglesia consideraba que bañara era un lujo innecesario y pecaminoso, así esta práctica fue abandonada casi por completo desde la Edad Media (siglos XI a XIII a.C.) hasta la época victoriana (siglo XVIII).

Afortunadamente, los avances en la ciencia durante el siglo XIX rescataron las bondades del baño frecuente y su valor en la higiene personal. Diversos estudios demuestran que la piel posee un pH ligeramente ácido, lo cual impide que bacterias, virus y  otros gérmenes puedan dañarla.

Los Especialistas recomiendan ducharse sólo una vez al día debido a los daños dermatológicos que pueden provocar los productos para el aseo, pues algunos alteran las propiedades normales de la piel.

 

La higiene es el conjunto de conocimientos y técnicas empleadas para el control de todos aquellos factores que ejercen efectos nocivos sobre la salud. El término se deriva del Higía, la diosa de la curación en la mitología griega.

Actualmente se puede distinguir entre la higiene personal (cuya aplicación es responsabilidad del propio individuo) y la higiene pública (que debe ser garantizada por el Estado).

La higiene y sus procedimientos relacionados cobraron importancia para los gobiernos a partir de la Revolución Industrial (siglo XVII), momento en que fue preciso sanear y desinfectar las fábricas debido a la abundancia de ratas, las cuales provocaban, a través de sus excrementos, graves enfermedades parasitarias, tales como teniasis o triquinosis.

Desde entonces, la higiene se ha convertido en parte vital, tanto del aseo personal, los lugares públicos y las viviendas, como de los centros sanitarios, donde seguir ciertas normas es fundamental para prevenir contratiempos en los enfermos hospitalizados. El objetivo básico de la higiene es mejor de salud, conservarla y prevenir enfermedades e infecciones.

Gracias a los experimentos de Luis Pasteur (1822-1895) que probaron la teoría germinal de las enfermedades infecciosas higiénicas cobraron suma importancia en las intervenciones médicas y en la vida diaria de la población como sinónimo de salud.

Dicha teoría propone que los microorganismos son la cause de una amplia gama de enfermedades, al invadir a los humanos y a los animales.

Tales gérmenes son llamados agentes patógenos, pueden ser de varios tipos; virus, bacterias, hongos o parásitos.

Con el paso del tiempo, el término higiene ha integrado a los métodos que los individuos emplean para estar limpios, por ejemplo, el uso de jabón, champú y agua; aunque también hace referencia a situaciones interpersonales como: hábitos de limpieza en lugares públicos, prevención de enfermedades contagiosas en el área médica y revisión de factores ambientales en el lugar de trabajo que provocan enfermedades, malestares, incomodidad e ineficacia laboral.

De acuerdo con la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) existen cuatro grupos alimenticios principales. Todos ellos son grupos importantes y no pueden, ni deben, ser reemplazados entre ellos.

En la base de la pirámide se encuentran los granos como el maíz y el arroz; proveen carbohidratos y otros elementos vitales, así como la materia prima para las tortillas, las pastas o el pan.

Las frutas y los vegetales están en el siguiente nivel, que son alimentos ricos en fibra, contiene vitaminas y minerales; se recomienda ingerir de tres a cinco porciones de vegetales  cada día y dos a cuatro porciones de frutas.

En el tercer nivel se encuentran dos grupos, la leche y sus derivados (como el yogur y los quesos), también las carnes (como la de pollo y el pescado) y frijoles, lentejas, huevos y nueces, alimentos que son fuente de proteínas y minerales esenciales como el calcio y el hierro. Lo ideal es ingerir de dos o tres porciones de estos alimentos al día.

Las grasa, los aceites, los postres y los dulces están en el último nivel; la FAO sugiere que de este grupo no se consuma tanto, ya que no proporcionan muchos nutrientes, además pueden perjudicar la salud.

Un estilo de vida saludable es el conjunto de actividades que las personas hacen diariamente o con frecuencia para mantenerse lo mejor posible, tanto en salud mental como física. Tambien tienen que ver las necesidades de bienestar, la economía y la fuerza de voluntad y ya que estamos expuestos a la publicidad que estimula el consumo desmedido de productos y alimentos poco nutritivos de la vida moderna. El comportamiento de la gente ante tales agentes derminará su estado de salud, dicha conducta será decisiva en la recuperación si hay enfermedad y en la velocidad a la que ésta se procuzca.

Hacer ejercicio y llevar una alimentación sana son estrategias útiles para nuestra salud física y mental, además economizamos, lo que se gasta en alimentos nutritivos y/o  en un gimnasio, puede implicar futuros ahorros en atención médica.

Debido a nuestro actual estilo de vida existen riesgos de padecer algún tipo de enfermedad como la obesidad o la hipertensión, lo mejor es evitar alimentos ricos en grasas y comer más frutas y verduras frescas.

En el año 2004 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el combate mundial a la alimentación poco saludable y el sedentarismo, animó a mantenerse en buenas condiciones físicas y mentales, a partir de entonces se ha puesto énfasis en un estilo de vida saludable.

Pensamiento constructivo para una vida sana: todos tenemos un gusto imposible de resistir , para algunos es el chocolate para otros la galletas, en lugar de pensar: “me comerá sólo uno”, mejor contrólate y consume menos calórico como una gelatina o una fruta fresca.

Cuando se adquiere ropa nueva es costumbre que se prueba antes de comprarla, de tal manera estamos expuestos a microbios, los cuales pueden causar enfermedades. Tal revelación la comparte la Dra. Emilce Méndez, investigadora de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional del Litoral (Argentina), quien comenta sobre las precauciones al respecto.

La ropa nueva generalmente es manipulada por muchas personas (quienes la confeccionan, la empaquetan y la dispone en las tiendas) antes de llegar al consumidor final. En todo ese recorrido también puede caer al suelo y ser infectada por bacterias, hongos y virus.

La especialista señala que es en los probadores donde los agentes infecciones llegan a las prendas nueva, ya que puede ocurrir que personas con lesiones en la piel, granos o pústulas contaminen las ropa nueva con Staphylococus aureus, bacteria causante de diversas y graves enfermedades.

Se concluye que no hay seguridad en una prenda nueva, es posible que no esté libre de gérmenes patógenos, incluso las personas saludables contienen en su organismo microbios que pueden adherirse a la ropa.

Se concluye que no hay seguridad en una prenda nueva, es posible que no esté libre de gérmenes patógenos, incluso las personas saludables contienen en su organismo microbios que pueden adherirse a la ropa.

Para evitar enfermedades se recomiendan estas acciones básicas: en las tiendas deben probarse  las prendas con ropa debajo para evitar el contacto directo con el cuerpo. También hay que lavar la ropa nueva antes de usar.

cursoFelicidadLa Universidad de Harvard diseñó un curso sobre Felicidad, miles de personas han asistido a él, y han logrado cambiar su estado de ánimo. Sigue algunos tips de este curso, para que tu también aprendas éstas técnicas sencillas y muy efectivas para sentirte FELIZ, te aseguro que tendrás un 2012 positivo, y lleno de bendiciones.

TIP 1
Practica algún ejercicio: (caminar, ir al gym, yoga, natación etc). Los expertos aseguran que hacer ejercicio es igual de bueno ó mejor que tomar un antidepresivo para mejorar el ánimo, 30 minutos de ejercicio es el mejor antídoto contra la tristeza y el estrés.

TIP 2
Desayuna: Algunas personas se saltan el desayuno porque no tienen tiempo o porque no quieren engordar. Estudios demuestran que desayunar te ayuda a tener energía, a pensar y a desempeñar exitosamente tus actividades.

TIP 3
Agrádece a la vida todo lo bueno que tienes: Escribe en un papel 10 cosas que tienes en tu vida que te dan felicidad. Cuando hacemos una lista de gratitud, nos obligamos a enfocarnos en cosas buenas.

TIP 4
Se asertiv@: Pide lo que quieras, y di lo que piensas. Está demostrado que ser asertiv@ ayuda a mejorar tu autoestima. Ser dejad@ y aguantar en silencio todo lo que te digan y hagan, genera tristeza y desesperanza.

TIP 5
Gasta tu dinero en experiencias, no en cosas: Un estudio descubrió que el 75% de personas se sentían más felices cuando invertían su dinero en viajes, cursos y clases; mientras que sólo el 34% dijo sentirse más feliz cuando compraba cosas.

TIP 6
Enfrenta tus retos: No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. Estudios demuestran que cuanto más postergas algo que sabes que tienes que hacer, más ansiedad y tensión te generas. Escribe pequeñas listas semanales de tareas a cumplir y cúmplelas.

TIP 7
Pega recuerdos bonitos, frases y fotos de tus seres queridos por todos lados. Llena tu refrigerador, tu computadora, tu escritorio, tu cuarto….TU VIDA de recuerdos bonitos.

TIP 8
Siempre saluda y sé amable con otras personas: Mas de cien investigaciones afirman que tan solo sonreír cambia el estado de ánimo.

TIP 9
Usa zapatos que te queden cómodos: “Si te duelen los pies te pones de malas” asegura el Dr. Keinth Wapner presidente de la Asociación Americana de Ortopedia.

TIP 10
Cuida tu postura: Caminar derecho con los hombros ligeramente hacia atrás y la vista hacia enfrente ayuda a mantener un buen estado de ánimo.

TIP 11
Escucha música: Está comprobado que escuchar música te despierta deseos de cantar y bailar, èsto te va a alegrar la vida.

TIP 12
Lo que te comes tiene un impacto importante en tu estado de ánimo:
a) Comer algo ligero cada 3-4 horas mantiene los niveles de glucosa estables, no te brinques comidas.
b) Evita el exceso de harinas blancas y el azúcar.
c) COME DE TODO !
d) Varía tus alimentos.

TIP 13
Siéntete Guap@:
El 41% de la gente dicen que se sienten más felices cuando piensan que se ven bien. No seas ni te veas fodongo ¡ Arréglate y ponte guap@ !

TIP 14
Disfruta lo que haces:
Está comprobado que, no es hacer lo que quieres lo que trae felicidad al ser humano, si no querer y disfrutar lo que uno hace; de lo contrario te estarías suicidando en abonos.

TIP 15
No te distancies de Dios:
Religiosidad no es sinónimo de Espiritualidad, no te olvides de tu origen divino y manténte en contacto con Dios, y descubre que solamente debes alinear tu mente y dejar que tus actos sean guiados por Él.

Atole ricoSe coloca medio litro de agua en la licuadora con una cucharada sopera de harina integral, otra de harina de centeno, una más de harina de amaranto, dos cucharadas de ajonjolí, media cucharadita de canela en polvo, dos cucharadas de leche en polvo y dos cucharadas de azúcar morena o mascabado.

Se licua muy bien y se pone a hervir al fuego lento por cinco minutos contados, a partir de que suelte el hervor. Se cuela y lo que queda en la coladera se come aparte, porque ahí está la fibra tan importante para conservar la salud.

Este es un atole muy rico, nutritivo que les va a gustar mucho tanto a los niños como a los adultos y se puede variar con almendras, semillas de girasol, de calabaza o nueces en lugar de ajonjolí.

Champú con aceiteA un frasco de un buen champú de cuarto de litro se le agrega cuatro cucharadas de aceite de aguacate (lo venden en las farmacias grandes), si compra 100 mililitros le va a durar mucho tiempo. Se mezcla muy bien el champú con el aceite y cada vez que se vaya a lavar el cabello, ponga una cucharada del champú en una tacita, agréguele una yema de huevo y media cucharadita de ron. Cuando el cabello ya no esté reseco y note que ha mejorado y que tiene más brillo, ya puede usar el champú sin la yema de huevo ni el ron.

Recuerde que debe mezclar muy bien el frasco del champú con el aceite de aguacate para que quede perfectamente incorporado y que no vaya a quedar arriba el puro aceite.

blanquearmanosMezcle una cucharadita de mantequilla con una de azúcar y el jugo de un limón, se extiende esta pasta en las manos, se deja 10 minutos y después se frotan suavemente para no lastimarlas durante cinco minutos, enseguida se retira la grasa con toallas de papel, se enjuaga con agua tibia y termina con agua fría. No use jabón y seque sus manos con servilletas de papel suave.